En el fondo del mar matarile-rile-rile, en el fondo del mar matarile-rile-rón.....
Hola mis pequeños pimpines (nueva palabra que he aprendido durante el fin de semana):
Me quejaba de que no me pasaban cosas últimamente, pues bien mis queridos lectores, este finde da para un par de posts de los largos...
Creo que anteriormente no habia comentado la intencion de Pin&Pon de comprar una piragua hinchable y por eso voy a entrar ligeramente en antecedentes...

Hace cosa de mas de un mes me llegó un mail de Pon proponiendome comprar una barca para irnos a remar los findes a pesar de saber que un saco de patatas y yo remamos lo mismo.
Tras informarmos de los precios y modelos de piraguas (hinchables, rigidas, dobles, simples...) elegimos comprar una en
interamigosdepinyponsport por un precio bastante asequible, nos agenciamos un par de salvavidas (puede que no sean necesarios pero dada nuestra experiencia con embarcaciones nauticas.... mejor no morir en el intento) y ya estábamos listos para nuestro primer paseito por el mediterráneo.
Bueno miento, para ello hacia falta tener la barca en
ciudadeponconmar y no en
ciudadepinconrio. Esta condición se cumplió este viernes pasado cuando cargada con mi bolsa de viaje, una barca hinchable de 3 metros y medio, dos remos dobles y un inflador llegué a
ciudaddeponconmar. Al dia siguiente ya estabamos despiertos a las 8:30 de la mañana dispuestos a ir a la playita a estrenarla.

Cargamos la bala verde con todo lo necesario y elegimos una playa a unos 5 kilometros de casa de Pon. Una buena playa, la mas larga de los alrededores, no mucha gente a la que dar con los remos y especialmente preparada para barcas, barcos, motos de agua y tablas de windsurf, el único inconveniente de la playa es que estaba un poco lejos, pero eso qué mas daba.... (si, si..... una tonteria no???)
Una vez hinchada la barca sin grandes problemas, guardamos todo en el coche. Y cuando digo todo es todo, ropa, moviles, dinero, documentación... todo menos la llave del coche, una toalla y las chanclas.
La llave del coche la guardó pon en el bolsillo de su bañador y el resto de cosas se quedaron en la playa. El paseo en barca fue estupendo... sol, brisa, y nuestras compañeras de viaje fueron las medusas...
Desde luego nuestra técnica de remado dejaba bastante que desear e ibamos avanzando de lado a lado haciendo eses, espirales, trompos y loops varios pero al final conseguimos avanzar a una velocidad razonable y en mas o menos la dirección y sentido deseados.
Hay que decir también que a pesar de lo que esperaba Pon de mí, remé bastante mas que un saco de patatas y hay que reconocer que no me cansé apenas.
De vuelta ya hacia la arena Pon saltó de la barca y la empujó hasta tierra firme, yo mientras me entretuve en el agua poniendo a prueba mi salvavidas (funciona y se flota guay). Arrastramos la barca hasta la toalla todo contentos por lo bien que lo habiamos pasado y entonces es cuando nos dimos cuenta...
Pon: voy al coche a por el movil, voy a contar a interamigosport lo
bien que ha ido el paseo!
Pin: vale, de paso traeme la ropa del coche.
Pon: ups! donde esta la llave? (matarile-rile-rile)
Pin: la habias metido en tu bolsillo sol (en el fondo del mar, matarile-rile-ron)
Efectivamente, tras registrar todos los rincones de la barca, llegamos a la conclusión de que las llaves estaban en el mar. Ole, ole y ole, estas cosas solo nos pasan a nosotros.
Sin dinero, sin ropa, sin telefonos, a 5 kilómetros de casa y lo peor de todo, sin sabernos ningun telefono de nuestros amigos de alli.
Posibles soluciones al problema planteado:
a) ir al puesto de la cruz roja, darles pena, y que nos dejen llamar a alguien: a quien ibamos a llamar? o a los padres de Pin o a los de Pon y que se las ingeniaran para conseguir el telefono del a
doptadodepon, quien nos vendría a buscar y nos traería la llave de repuesto de la bala verde. Desestimamos la opción porque todos se encontraban pasando el fin de semana fuera de casa y no era plan de que se enteraran de tal peripecia. Los padres tienden siempre a alarmarse por todo y a recordartelo hasta el inifinito.
b) que Pin se quedara en la playa con la barca, Pon mientras andaba por la carretera 5 kilómetros en bañador y chanclas hasta casa, avisaba al
adoptadodepon y me venían a buscar. Contras: que adoptado no estuviera en casa ( suceso con probabilidad 90%) y alli sería aún mas dificil que alguien le dejara llamar por teléfono (dejariais a alguien con esas pintas entrar en vuestra casa? por no decir que en el edificio solo están habitados 3 pisos). O sea, resultado de la idea: Pon esperando 6 horas en las escaleras de su casa a que llegue
el adoptado y Pin 7 horas o mas en la playa, chamuscada y del color de una gamba, bajo la sombra de una barca amarilla de 3 metros y pico y sin comer desde las 9 de la mañana. DESESTIMADO.
c) y por ultimo y opción no desestimada: buscar la llave en el mar. Posibilidades de encontrarla? las mismas que encontrar una aguja en un pajar o de acertar 15 en la quiniela. Pero eso nos iba a detener??? Nooooooo. Nos encomendamos a santa Rita (si, la de lo que se da no se quita / patrona de los imposibles) y nos metimos en el mar en busca de la llave cantando mentalmente esa canción infantil tan entrañable que dice:
Dónde están las llaves,matarile, rile, rile. Dónde están las llaves,matarile, rile, ron chimpón.
En el fondo del mar,matarile, rile, rile. En el fondo del mar,matarile, rile, ron chimpón.
Quién irá a buscarlas,matarile, rile, rile. Quién irá a buscarlas, matarile, rile, ron chimpón.
Irán Pin y Pon ,matarile, rile, rile. Iran Pin y Pon,matarile, rile, ron chimpón.

Para aumentar las probabilidades de éxito Pon pidio prestadas a un niño que buceaba por alli sus gafas de buceo y el niño se quedó un buen rato aburrido.
Mientras yo peinaba la zona arriba y abajo, de un lado al otro, Pon bucea que te bucea y cuando estabamos a punto de darnos por vencidos... incluso Pon había devuelto las gafas.... que es eso negro que se mueve? uy, espera que le doy con el pie....
PON ENCONTRÓ LA LLAVE!!!!!!!!!!Sólo una palabra para definirlo: INCREIBLE.
Gracias Rita, maja, a la próxima te pago un cubata.