Correspondencia epistolar (I)

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De: Sarasell
Enviado el: miércoles, 24 de mayo de 2006 16:16
Para: Benelick
Asunto: En un país multicolor

Figueruelas, condado de Hazard, a 24 del corriente

Estimada señorita Benelick:

Si bien es cierto que me llena de desazón e intransigencia el conocimiento de los hechos que me detalla en su misiva epistolar, no menos cierto es que mi aprensión xenófoba tilda de tintes de sinergia la complicidad que me hacen sentir las venta de albóndigas con el exterminio de razas inferiores como por ejemplo, los marsupiales. A quienes tengo por enfermizos, enclenques y muy dados a la acumulación de ponzoña.

En otro orden de cosas, el orden sociopolítico actual, la confabulación suprarrenal de las especies y el quédiran, me instan a la cautela y a no pronunciarme en temas que se salgan de lo establecido por la línea del partido, a saber:
- Glosa de hechos históricos peregrinos, como la toma de los retretes de la taberna del herrero por tropas carlistas ebrias de moscatel en 1789.
- Alabanza y loa de especies autóctonas de la zona, como el pájaro Uyuyuy, quien debe su peculiar sonido a que sus pelotas sobrepasan la envergadura de sus patas y rozan con las áridas estepas de Garrapinillos, al aterrizar.
- Victimismo ante la injusta relación de nuestra comarca con el apestoso y opresor gobierno central, sito en Garrapinillos.

Sin mas que conminarla a dirigirse al sumo sacerdote del bagkammon para ulteriores denuncias, y no sin antes citar a los Beatles - y cito - Obladioblada, se despide atentamente, haciendo constar que , si, efectivamente, yo también me aburro como un supositorio en culo de boris,
el abajo firmante,

Sarasell

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De: Benelick
Enviado el: jueves, 25 de mayo de 2006 15:02
Para: Sarasell
Asunto: con cien cañones por banda viento en popa a toda vela

Lastimado señor Sarasell:

Como asintóticamente te iba comentando en lo que al tuteo se refiere, en lo sucesivo incluso me sigue llenando de orgullo y calefacción la recepción de su respuesta pospuesta, sin menoscabar la intransigencia de sus palabras, donde va a parar.
Los hechos acontecidos a la par que subversivos en todas sus instancias revelan la falta de consenso conceptual del acontecimiento francamente pospuesto.
Sin mas dilacion ni deforestación me dipongo a rebatirle su argumento del perrito piloto, sobradamente demostranda su luminiscencia en las noches otoñales del periplo lunar.
Disponiendo de los tales enseres, dados x e y, concluimos con cierto retintin en la incongruencia el artilugio patentado en cuestión, con incluso motivo de indignación y/o/u alboroto, algarabía e inclusive aquiescencia por tales endometrios dispuestos de facto.

Por todo ello, dispósome a comunicar la excelentísima nueva de mi sopor postmeridiano a su señoria de cuerpo presente.Los mas afectuosos saludos de mis partes todas implicadas en el acto de la salutación misma.

Benelick

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De: Sarasell
Enviado el: miércoles, 25 de mayo de 2006 16:10
Para: Benelick
Asunto: nadie da duros a cuatro pesetas

Sonseca, en el dia vigésimo del año de la Victoria.

Desde que la Victoria, la Viki como la conocen en su casa, se atribuyó el derecho canónigo para ensaladas de arrostrar la pena y el llanto que implican la responsabilidad de figurar como titular de un periodo de 365 dias - y respiro - , desde entonces , digo y afirmo, que nunca mas volvióse a oir copla , tonadilla o requiebro que quisiera acaso resucitar el olorcillo característico de las tonadas del bajo Missouri, tan magistralmente ejecutadas por John Cougar Mellencap, cuyos padres eran primos de primer grado.

Pero no adelantemos acontecimientos, que de ello han de encargarse los mercachifles del porvenir, bien sean gordas peliteñidas de escasa catadura moral, bien ancestrales bocanchos de feria y populacho, al gusto de la plebe.
Yo, desde los umbrales del sopor, la compilacion y el debugueo, puedo afirmar, sin yerro o traspiés lógico en la lontananza más próxima, que si de otra época se tratase juraría en hebreo y me cortaría las bolas por no hacer que la tarea que me traigo entre manos compile, pero que en estos días que corren, me veo más por la labor de pegarle por la espalda a un enano cojo con un palo largo para descargar mi ira sin temor a represalia alguna, excepto las de tipo verbal.

Son las tres de la tarde, y no quiero ni acostarme. Canijo , ¿Tú que quieres? , - Quiero invitarte, yo quiero invitarte a un huevo duro, y a una rodaja, de tomate.
Con el sentimiento garrapatero que tienen los bichos que salen de las flores, se despide,

Sarasell