Pintronix, print yourself

Míralas que monas ellas dos, sobre todo la de las repisitas metálicas. Con sus ruedecitas, sus lucecitas en el frontal, con su papel contínuo, china-chana imprime que te imprime...

Que no os despiste su inofensiva apariencia. Ante vosotros ustedes se encuentra una de las mayores y a la vez más grandes, por no decir la más enorme de las tachán-tachán armas mortiferas de destrucción masiva. ¡¡¡¡La impresora atómica!!!!.

Esta maravilla del exterminio timpanil, vamos a hacer publicidad, es una fantástica ejemplar de Printronix y si no cuesta 3000$ no te cuesta ninguno.

Yo, que soy una afortunada de las de toda la vida, tengo el placer y el gusto justo de disfrutar de su rítmico traqueteo a diario, ya que tamaña impresora se ubica junto a mi mesa en Oficinadepin. Pero hoy, he llegado al cúlmen y el súmum del orgullo beesejotero.
Inciso: Por Beesejota, Biesyei o BSJ vamos a entender el actual departamento de Currodepin en el que trabaja Pin. Fin del inciso.
Queridos blojistas, hoy le han puesto como nombre a mi querida Printronix: Pin.

Me llena de orgullo y satisfacción.... os agradezco a todos mis compañeros.... enorme muestra de cariño implicita en este gesto.... y humildemente .... sin más agradecimiento que el mostrado... blabla blabla.... queda botada esta impresora con el nombre de Pin!!!
(voz en off: bieeeeeennnnn, hurraaaaaaa, viva Piiiiiiin, y que impriiiimaaaa muuucho maaas....)

Y ahora, saliendo de mis ensoñaciones, os cuento las verdaderas razones que han llevado a mi querido compañero Svenatje en Nórdico/ Svencico en Mundopinés a ponerle mi nombre a la impresora más ruidosa del planeta:

1.- Las dos sois igual de ruidosas

2.- Las dos, cuando queréis, no haceis cosas que son fáciles

3.- Las dos funcionais peor los lunes y los viernes

Con compañeros así, da gusto ir a trabajar... (lo tengo en el bote)